Los tratamientos convencionales para la leucemia linfocítica aguda (LLA) que comienza en la edad adulta son la quimioterapia y el trasplante de células madre (médula ósea). Según las características de la enfermedad, es posible que también pueda recibir una especie de inmunoterapia en la que se entrenan sus propias células inmunitarias para buscar y destruir el cáncer, llamada terapia de células T con CAR.
En Memorial Sloan Kettering, elaboraremos un plan de tratamiento especialmente para usted. Este plan tendrá en cuenta una serie de factores. Estos incluyen el subtipo de la enfermedad, la cantidad de células leucémicas en la sangre y los cambios cromosómicos.
El tratamiento inicial convencional para la LLA en general se divide en tres fases: inducción, intensificación y consolidación y, por último, mantenimiento.
Inducción
Durante la fase de inducción, nuestros médicos tienen como objetivo inducir una remisión. Esto significa que no hay evidencia visible de enfermedad y sus recuentos sanguíneos son normales. Es posible que recomendemos una combinación de fármacos. Estos fármacos incluyen:
- vincristine (Oncovin®, Vincasar® PFS, Vincrex®)
- corticoesteroides
- L-asparaginase (Elspar®, Kidrolase®)
- doxorubicin (Adriamycin®, Rubex®)
- daunorubicin (Cerubidine®)
- cyclophosphamide (Cytoxan®)
El tratamiento puede durar hasta cuatro semanas. Deberá permanecer en el hospital durante esta parte de su tratamiento.
Nuestros médicos y científicos han desarrollado un régimen de inducción para adultos basado en un método utilizado para niños con LLA. Utiliza más vincristine, corticoesteroides y L-asparaginase. Esta estrategia parece ser más eficaz que muchas de las terapias existentes para adultos. Está disponible como parte de un ensayo clínico.
Intensificación y consolidación
Se administra un tratamiento secundario para eliminar cualquier célula cancerosa que pueda quedar en el cuerpo durante la fase de intensificación y consolidación. Esta fase en general consiste en administrar más quimioterapia. Puede durar varios meses. Es posible que también reciba un trasplante de células madre en ese momento.
Obtenga más información sobre el trasplante de células madre de la sangre y la médula ósea.
Mantenimiento
Durante la fase de mantenimiento, es posible que reciba dosis más bajas de fármacos, pero durante períodos prolongados, en general dos años. Esto destruirá las células leucémicas restantes. Por lo general, estas células no se pueden detectar mediante pruebas de laboratorio. Nuestros médicos suelen utilizar methotrexate (Rheumatrex®, Trexall®), 6-mercaptopurine (Purinethol®), vincristine y prednisone (Cortan®, Deltasone®, Orasone®, Sterapred®) durante la fase de mantenimiento.
Terapia de células T con CAR
La terapia de células T con CAR es un nuevo tratamiento interesante y poderoso para ciertas personas hasta los 25 años cuya LLA ha dejado de responder a otras terapias. Las células T con CAR a veces se denominan “fármacos vivos”. Eso es porque el tratamiento usa sus propias células para tratar el cáncer. Con la terapia de células T con CAR, las células inmunitarias se filtran de la sangre. Luego se envían a un laboratorio, donde se las equipa con nuevas proteínas que les enseñan a reconocer el cáncer. Luego, las células recién sobrealimentadas se multiplican y se infunden nuevamente en la sangre, donde pueden buscar y destruir el cáncer.
Memorial Sloan Kettering es una de las pocas instituciones seleccionadas que están equipadas para administrar la terapia de células T con CAR de manera segura. Nuestros médicos y enfermeros tienen una experiencia incomparable en el cuidado de las personas que reciben este tratamiento. Nuestro personal clínico, incluido nuestro Servicio de Trasplante de Médula Ósea, tiene mucha experiencia en minimizar los riesgos y controlar los efectos secundarios. Los científicos del Memorial Sloan Kettering fueron pioneros en el desarrollo de la ciencia y la tecnología de la terapia de células T con CAR. Estamos investigando cómo hacer que funcione mejor y funcione para más personas.
Obtenga más información sobre el tratamiento de células T con CAR.
Tratamiento para la LLA Ph positiva
Si le han diagnosticado LLA Filadelfia positiva (LLA Ph positiva), es posible que reciba ciertas terapias dirigidas que han demostrado ser particularmente eficaces contra este subtipo de la enfermedad. Nuestros investigadores fueron fundamentales en el desarrollo de estos tratamientos. Estos fármacos incluyen imatinib (Gleevec®), dasatinib (Sprycel®) o nilotinib (Tasigna®) en combinación con otros fármacos de quimioterapia.
Tratamiento para la afectación del sistema nervioso central
La LLA a veces se disemina al sistema nervioso central, que consiste en el cerebro y la médula espinal. Nuestros médicos tienen experiencia en prevenir o controlar la afectación del sistema nervioso central. Podemos administrar quimioterapia directamente al líquido que rodea la médula espinal y el cerebro. Este procedimiento se conoce como quimioterapia intratecal. Es posible que reciba quimioterapia sistémica de dosis alta o irradiación craneal (radioterapia dirigida al cerebro). Estos métodos pueden prevenir la diseminación de la enfermedad al sistema nervioso central.
Enfoques en investigación
Nuestros investigadores buscan siempre nuevas formas de tratar la LLA. Estos métodos pueden eliminar las células tumorales directamente, inhibiendo la producción de sustancias del cuerpo que promueven su crecimiento o mejorando la respuesta inmunitaria contra las células leucémicas.
Obtenga información sobre nuestros ensayos clínicos para la LLA.
Algunos de los métodos de quimioterapia combinada más nuevos que estamos estudiando en adultos están inspirados en tratamientos innovadores desarrollados para niños con LLA. Estos tratamientos pueden ser más eficaces que las terapias convencionales existentes. Nuestros investigadores están liderando ensayos clínicos que incorporan estos nuevos métodos en el tratamiento desde el momento en que se le diagnostica por primera vez.
Nuestros investigadores también están estudiando nuevas terapias que se dirigen a cambios genéticos comunes en algunos subtipos de LLA. Buscamos anomalías cromosómicas y mutaciones genéticas en todas las personas con LLA que atendemos. Trabajamos con esmero para identificar cambios genéticos que puedan ayudar a crear nuevas terapias dirigidas.